¡No seas un estúpido, si quieres vivir!

Alguien me decía que el mundo jamás se detendría, era de locos pensar que una situación así algún día se pudiera llegar,  hoy me río de lo ingenuo que podemos ser, nos creemos tan fuertes y no somos nada más de una mezcla de egos y mundos creados en la ficción de una mente pequeña, basada en pilares de cristal de la peor calidad.

Tan frágil, tan débil, que cuando vimos por primera vez la noticias que provenían del gigante asiático,  nuestra mente de formada de materialismo, de súper poder, de manera inmediata dijo: “eso por acá no llega", y cerramos la puerta a la preparación, a fortalecer nuestros estados, a la educación y nos encaminamos directamente al abismo de un contagio innegable.

Nuestra mente nunca estuvo dispuesta a recibir tal información, porqué alguien nos dijo que: no piense en eso, porqué lo atrae”, la ignorancia es atrevida decía mi abuelo, como si la negación de una realidad solucionara un problema,  a ese nivel de estupidez llegamos.

El gran ser humano, el que ha dominado todas las especies jamás podría arrodillarse, eso lo decían nuestros gobernantes, por eso salían campantes con sus discursos plagados de palabras motivadoras y de invenciones de mentes cargadas de realidades petulantes, discursos bravos para intentar demostrar fortaleza que no tuvieron cuando el tono gris empezó a cubrir el mundo.
Pero  como no  entender una realidad como la que vivimos, como entender la necesidad de decidir entre la vida y el día, como hacerlo cuando el sistema nos moldeó, para creer que la vida es menos valiosa que la necesidad de sentir la seguridad que produce el creer que los bienes materiales y el dinero, son más más importantes que la vida misma, cuando suponemos que vivir con poco es un fracaso así se tenga la vida, es triste ver como la vida pierde por completo su de valor en esta escalera de valores superfluos.

Escribo porqué se qué muy pocos leen, escribo porqué quizás mis palabras podrían hacer más daño que bien, porqué quizás usted este esperando un hermoso mensaje de esperanza, lleno de palabras cargadas de emoción, que le digan lo que usted desea escuchar, pero eso no lo pienso hacer, porqué hoy estoy tan decepcionado de lo que hoy somos, cuando lo único que nos piden es no hacer nada y hacemos lo contrario, cuando nos piden cuidar nuestra vida y no podemos hacerlo, solo me siento haciendo parte de una generación estúpida, hinchada de egos, que nos llevan en la dirección correcta a nuestro fin.

Se que este articulo no es lo políticamente correcto, y si llego a este punto demuestra que ha disfrutado esta lectura, poco agraciada, cargada de acusaciones directas a nuestro yo interior,  por eso solo le quiero terminar dando la clave para sobrevivir a la hecatombe en la que este mundo se encamina, y es muy simple: “sea más inteligente que el resto", demuestre que su capacidad de comprensión y acción está por encima del mundo promedió, y por favor sea un buen ser humano,  no queremos repetir los mismos errores.